"Me siento como un fantasma vagando por un mundo que se ha vuelto extraño. No puedo alejarme de la vieja forma de componer, ni adoptar la nueva. He realizado esfuerzos intensos por sentir el estilo musical de la actualidad, pero no lo consigo [...] Siempre siento que mi propia música y mis reacciones a toda la música siguen siendo las mismas en un sentido espiritual, en eterna obediencia al mandato de crear belleza [...] La nueva clase de música no parece salir del corazón sino de la cabeza. Sus compositores piensan, más que sentir. No poseen la capacidad de hacer que sus obras se eleven: median, protestan, analizan, razonan, calculan y se inquietan, pero no se elevan".
- (Leonard Liebling ) Entrevista con Sergei Rachmaninov The Musical Courier , 1939.